Casa, hogar. Ese aroma familiar. Es un motivo recurrente en esta ensalada...
Con los años aprendí, quizá románticamente, que "casa" no es mas que el aroma de la persona amada. Entendiendo casa, como esa persona que te concilia sueños, emociones, frustraciones y energías-
Aprovecho para recordarte que te amo con todo el corazón.
No es cuantificable. No hay mas o menos que nadie. Sos vos en la oscuridad, en el vació, en el frio, en la soledad, en la tristeza, en la frustración. En todo lo malo, sos el calor que me transmite tu sonrisa.
Y si, sos frustración. Es impresionante la cantidad de veces que quisiera dármela contra esa pared. Ese norte, aquel estandarte, la batalla perdida y la deriva. Desde entonces persigo "el eco de tu perfume" ..
Recurrente.
Y si, es cuantificable. No me das otra cosa en la que pensar mas que una cara dulce y una sonrisa peor. Al menos 2 razones a la distancia para creer, 3 años para entender, 4 minutos para escribirlo y como 5 vidas para sentirlo. Y entonces, cuan importante es como te sentas? Como me miras? El perfume que usas?
Si al final de cuentas en mi corazón ya tenias un lugar sin siquiera intentarlo. Ahora te esforzas?
Como no dejaste que te cuide, amor?
Entonces "casa" no es mas que la deconstrucción de tu cuerpo y el mio ardiendo y desprendiendo cenizas de un amor que tuvo que ser arrebatado para que nadie mas pueda robárnoslo. Ese olor a carmín quemado, la sangre en tus labios. El eco de tu perfume.
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